Díaz Galán apuesta por Albés y analiza las soluciones del Sporting a su crisis: «Deben pensar las causas de pelear siempre la salvación. Una afición tan grande merece alegrías»
Ismael Díaz Galán, entrenador de fútbol asturiano con un relevante pasado en Mareo, donde dirigió al Sporting ‘B’ en su momento, pero también fue pionero en la creación de la sección femenina del club en 1995, la primera escuela femenina de un club de Primera, y de actividades que hoy en día siguen siendo relevantes en la entidad como el Campus de Mareo, atendió la llamada de La Voz de Asturias para repasar diferentes aspectos generales del Real Sporting, desde su política de cantera a la situación actual del primer equipo, pasando por los primeros años de la gestión de la nueva propiedad con Orlegi Sports al frente.
¿Ha faltado seguir una línea adecuada en la formación del Sporting estos años?
«Para mí al Sporting le sobra coyuntura y le falta estructura. Es decir, el Sporting lleva viviendo décadas del hoy, de qué pasa hoy, a quién quito hoy, a quién ficho hoy, y se han parado muy poco a pensar en qué quiere ser en cuanto modelo de juego y estructura de club. Todo esto que va y viene lo que supone es que se pierdan jugadores de la cantera por el camino, que se pierda dinero en fichajes. Si enfocas la cantera desde un punto de vista productivo, hay distintos modelos, las hay de formar en valores con características concretas, como el Athletic, otras escuelas mucho más metodológicas, como el Villarreal, que busca más un modelo de juego matizado por cada entrenador y otros como el Barça, donde el modelo de juego es innegociable. Yo cuando estuve con ellos invitado para conocer su método me decían, ‘nosotros no enseñamos a jugar al fútbol, enseñamos a jugar nuestro fútbol’. Si tienes una idea de modelo de cantera tienes que hacer que la estructura de arriba crea en ello. No vale traer un entrenador cada año y que a lo mejor ni crea en los jóvenes, ni conozca Mareo, porque entonces siempre va a ser improductivo. Yo creo que el Sporting lleva sufriendo un desfase en eso bestial y, entre medias, perdiéndose generaciones de jugadores».